jueves, 15 de mayo de 2008

Una minificción sobre cierto teatro


Teatro de la Verborragia

Finalizó la obra.
Los actores y las actrices, en la oscuridad, esperaron inútilmente el aplauso del público. Desde la sala, sólo les llegó el silencio.
El actor más decidido asomó su cabeza entre los telones, pero la oscuridad no le permitió ver. Avanzó más allá sin hacer ruido, primero hasta el centro del escenario, luego hasta proscenio, y se quedó helado...
Toda la compañía rodeó al actor, mirando hacia el público. Una voz rajada dijo sin convicción: ¡enciendan las luces de la sala!
Se hizo la luz… Ante la revelación, los actores se tomaron de las manos:
¡Todo el público se había ahogado en sus palabras!

1 comentario:

Anónimo dijo...

7º dia del 10º mes Tébet, año 5768

Mientras tú duermes yo me siento, al borde de la espuma, en la playa de tu alma a mirar el mar...